Con salarios superiores a los 18 mil pesos y con plaza, 4 de ellos comisionados al Sindicato
Un mismo día la candidato a Diputada Victoria Bentley, metió a la nómina municipal a parientes como empleados municipales y comisionados al Sindicato, violentando la normatividad y siguiendo la «costumbre» de dirigencias y alcaldías priístas.
Órgano de Fiscalización hizo las observaciones pero se pasaron por el arco del triunfo la normatividad, siguieron la «costumbre» priísta
Por Jaime Delgado
MEXICALI.- Una suerte de paradoja está viviendo el PAN al andar promoviendo que voten por Victoria Bentley, candidata a Diputada por el tercer Distrito.
Cuando el Sindicato de Burócratas -al menos sus dirigentes- estaban de aliados con el PRI -hace cosa de 3 años- la nómina del Ayuntamiento de Mexicali en turno entraban recomendados de la dirigencia de la representación gremial, con salarios altos y donde toda la parentela tenía cabida.
La nómina municipal al servicio del Sindicato y bajo la complicidad de administraciones priístas, había pues manga ancha para hacer crecer el número de empleados hasta rebasar al mismo gobierno municipal de Tijuana, con un población casi el doble al de Mexicali.
En Tijuana no quiere decir que sea el mejor ejemplo, pero Mexicali se lo llevó por ventajas: la nómina municipal creció y no se diga con personal de confianza.
En la administración de Francisco Pérez Tejada (PRI) de 2010 a 2013 emergió un nuevo liderazgo en el Sindicato de Burócratas, Victoria Bentley rompe con el PRI -fue integrante del comité seccional de Carmen Frías y Alicia Martínez- y decide aventurarse en la búsqueda de la Secretaría General, meta que consigue con el apoyo del PAN -hasta ahora salió el peine- el cargo por el compitió.
Nuevos tiempos para el sindicalismo, una dirigencia alejada políticamente del Partido en el gobierno. Todo mundo pensaba una mujer valiente que había enfrentado al Alcalde de Mexicali realizaría un gremio con mayor autonomía y permitiría que la relación con la parte patronal se llevará distinta, sin corruptelas ni tapaderas en cuanto al manejo del ingreso del personal.
Fue el 13 de febrero de 2014 el triunfo de Victoria Bentley. Mandó pintar los inmuebles del gremio de blanco y empezó asumir el liderazgo que había ganado con el apoyo de 1,934 votos, con una diferencia de más de 200 votos con el más cercano contrincante. Acabando con una tradición de décadas.
Sin embargo en diciembre de ese mismo año, Victoria Bentley empezó hacer de las suyas, y repetir viejos esquemas que tienen en quiebra nuestro municipio, que sangran el presupuesto y dañan el trabajo en beneficio de Mexicali.
Bentley violentó el artículo 165 de la nueva Ley del Servicio Civil, promoviiendo la contratación de Maricruz Ramos Tamayo, hija de Ascención Ramón Miramontes, de la subsecretaria de Acción Social del Sindicato, asignada al Instituto Municipal de Arte y Cultura con un salario de 18, 635 pesos, y de una vez comisionada al Sindicato, para que trabaje y no sufra de las obligaciones laborales como servidor público.
La hija bendecida por la protección sindical logró en meses lo que tardan en años otros trabajados que igualmente son sindicalizados y tienen más derechos por antigüedad.
Bentley no se quedó en eso, promovió e ingresó a la nómina municipal del XXI Ayuntamiento de Mexicali a su sobrina Estefanía Bentley Aguilar. A la joven la ubicaron en la Dirección de Desarrollo Rural con el número de empleada 17759, y para que no se agotara mucho en el trabajo público le dieron comisión al Sindicato de Burócratas donde la tía es quien manda. Sobre el salario de la muchacha es superior a 18 mil 635 pesos mensuales, y con plaza.
Cuanto personas con más derechos están en una lista de espera, tardan años en conseguir una plaza.
Bentley había continuado una tradición que tanto criticaron los panistas al PRI, meter a familiares a las nómina municipal. Tanto el PRI como el PAN lo han hecho y para que no quede duda alguna lo siguen haciendo, a pesar de que el Ayuntamiento de Mexicali está en una quiebra técnica.
El ingreso de la sobrina de Bentley fue en diciembre de 2014, ya Jaime Díaz como Alcalde.
Y para que no quedara duda que Bentley no se diferencia en nada a los ex dirigentes priístas para muestra un tercer botón.
En diciembre de 2014 Bentley promovió y logró meter como empleado municipal, base y comisión sindical a Karla M. Galindo Moreno, hermana de Carlos Galindo Moreno, subsecretario de Organización del Sindicato de Burócratas. El salario mensual es de 18, 635 pesos y como empleado en el Departamento de Limpia, pero para que la goce bien le dieron comisión al Sindicato.
Luego vino una cuarta acción de Bentley, mete en la nómina municipal a Claudia Cisneros Aramburo, y la asignan al Área Verdes y Jardines, con sueldo mensual de 18, 635 pesos pero reubicada al DIF municipal. La nueva empleada municipal es hija de la regidora Carmen Aramburo León, panista y aliada de la pareja municipal: Jaime Díaz y Sonia Carrillo. Bentley no solamente metía a sus parientes a la nómina, también los de las amigas.
Sonia Carrillo logró meter en la nómina municipal a uno de sus hijos, y asignarlo a Obras Públicas.
Bentley siguió perjudicado el presupuesto público en beneficio personal y de su camarilla. En diciembre de 2014 el Ayuntamiento de Mexicali contrata con plaza y todo a la de nombre Alejandra Solís Méndez, hija de otra de los integrantes del equipo de Bentley del área de finanzas del Sindicato identificada como Cecilia Méndez.
La nueva contratación fue asignada al Departamento de Limpia y Basura con un sueldo de 18, 635 pesos, y para quitarle carga de trabajo recibió comisión sindical.
Bentley y su Sindicato en el mismo día 8 de diciembre metieron a la nómina a 5 personas con el mismo sueldo mensual de 18 mil 635 pesos, cuatro con comisión al sindicato y una de ellas a cuidar a la pareja sentimental de Jaime Díaz, quien es la presidenta del DIF de Mexicali.
Todo esto fue investigado por el Órgano de Fiscalización Superior del Estado (OFSBC), se hicieron las observaciones de las irregularidades, pero aún así les valió y mandaron a la basura las irregularidades.
Todo el discurso de cambio de Victoria Bentley, quedó hecho trizas, y se arropó con el manto de la complicidad y corrupción. Falta revisar las nóminas de la CESPM, Gobierno del Estado, Poder Judicial y el resto de empresas públicas, no se olvide el Poder Legislativo. Luego hacer un cruce con los lazos familiares de la dirigencia del Sindicato de Burócratas.
Una maldita costumbre de llenar la nómina municipal con familiares y amigos, mientras personas sin influencias esperan años para recibir esos mismos beneficios, por años están en la lista o mejor demandar la plaza contratando a un Abogado laboral.
Hoy Bentley quiere ser Diputada local, y está en Usted si se permite que el sindicalismo corrupto, acartonado, dañino y aprovechado siga adquiriendo más poder.
Citando a Francisco Fiorentini, presidente de Coparmex de Mexicali: los líderes sindicales no sirven para legislar.
Para muestra varios botones en el SNTE, PEMEX, CFE y los burócratas.
Bentley ahora pide el voto a favor del PAN, quiere entrar al Congreso del Estado como legisladora, contraviniendo la firma de un compromiso que no aceptaría candidaturas del PAN y PRI aún si fueron a buscarla.
A final de cuentas Bentley aceptó y arrojó a la basura su compromiso firmado ante Notario Público.
Bentley se fue a un Distrito que es bastión panista, sin embargo llega impuesta por la dirigencia estatal del PAN lo que ocasionó que militantes del tercer Distrito no participen en su campaña, prefirieron otras demarcaciones electorales y otros candidatos.