Dice Director de Vialidad y Transporte
TIJUANA (AFN).- Óscar Morales Marrón, dirigente del Gremio de Taxis Amarillos, sobornó a la magistrada Flora Arguilez Robert para que fallara a favor de la agrupación en el conflicto con el Ayuntamiento, según lo dijo éste a sus agremiados justo antes de conocerse dicha resolución, afirmó Javier Salas Espinoza, Director de Vialidad y Transporte del gobierno municipal.
Esa es la información en que el 22 Ayuntamiento fundamenta las acciones contra la citada funcionaria del Tribunal de lo Contencioso Administrativo, así como la sospecha de que la funcionaria fue sobornada para fallar a favor de los taxistas, no obstante que la suspensión otorgada a estos afecta el interés social de los tijuanenses, aseguró el funcionario.
Según Salas Espinoza, luego de la decisión del Ayuntamiento de retirar los taxis de los sitios que tenían autorizados, el dirigente del gremio comunicó a sus compañeros durante una asamblea informativa -un viernes a las seis de la tarde- que el martes siguiente a las 13:00 horas les sería otorgada la suspensión provisional.
“Nosotros tenemos conocimiento de que Óscar Morales en una reunión con sus agremiados les dice que ya arregló y que la siguiente semana el día martes a la una de la tarde le van a entregar una suspensión; que pagó una fuerte cantidad de dinero por ella”, explicó el director de Vialidad y Transporte. «Vemos mala fe cuando nosotros vemos que el martes precisamente a la una de la tarde recibe la suspensión”.
“Así lo dice: el día martes a la 1 de la tarde la magistrada nos va a entregar una suspensión porque ya pagué una fuerte cantidad de dinero por ello, y a la una de la tarde casualmente la tiene, entonces hay mucha coincidencia”, añadió Salas Espinoza.
El funcionario calificó como mala fe la actuación de la magistrada cuando incluso afirmó que miente a un funcionario de la dependencia que acudió a confirmar la presentación de la demanda promovida por el Gremio de Choferes, de lo cual tenían perfecto conocimiento, y no obstante, la funcionaria negó tal hecho.
Describió también como un acto de mala fe, la decisión de multar al Ayuntamiento con tres meses de salario y amenazar con imponer otra sanción pero ahora por seis meses, si en un lapso de 24 horas no se acataba la resolución.
Javier Salas aseguró que fueron integrantes del mismo gremio, quienes después de la sesión con su líder Óscar Morales, acudieron a las oficinas de gobierno para informarles del contenido de la misma. El funcionario municipal no confirmó ni negó si las afirmaciones de Morales fueron grabadas. “Es una información que en su momento la vamos a utilizar”, respondió a AFN.