Dicen padres de familia que a los juzgadores en ocasiones no les interesa lo que pasa con los hijos cuando hay separaciones de las parejas.
MEXICALI. Padres de familia que no pueden ver a su hijo por problemas con sus exparejas, se manifestaron este viernes en las instalaciones del Poder Judicial del Estado, por los derechos de los niños, niñas y adolescentes en Baja California, sin embargo su esfuerzo se vio opacado ya que el poder judicial en el Estado se fue de vacaciones.
Miembros de la Asociación Por el Bienestar del Menor y la Familia, encabezados por Paulina Gutiérrez indicaron que esta agrupación conoce de cerca de 1,200 casos de menores que no pueden convivir con alguno de sus padres ya que durante el proceso de divorcio los pequeños muchas veces son usados como medida de presión o venganza en contra de la ex pareja.
Dijo que en muchos de los casos los jueces de lo familiar no hacen de manera correcta su trabajo, y no aplican medidas pertinentes para que la convivencia entre padres separados e hijos, se desarrolle de manera correcta.
“Lamentablemente en Baja California somos un Estado con altos niveles de divorcio, y en los divorcios hay niños, y estos quedan presos de un sistema judicial lento, que se lleva entre los pies la infancia de los pequeños “explicó.
Manifestó que existe una ley de derecho de convivencia, para que la interacción entre padres divorciados e hijos sea inmediata, de oficio, ya que en los procesos de separación y de establecimiento de custodia, pasa mucho tiempo y en ocasiones años.
“Tenemos casos de personas que tienen más de 7 años sin poder ver a sus hijos aun cuando han demostrado ser buenos padres que pagan puntualmente su pensión alimenticia y cumplen con lo exigido por el juzgador, aun cuando existe una orden judicial de convivencia no se aplican sanciones o medidas de apremio a los padres o madres que no cumplen con el mandato judicial, es tardado” precisó.
Paulo Cesar Delgado, un padre de familia que no ha podido convivir con su hija e incluso sin haberse podido divorciar, intenta recobrar la relación con su hija después de siete años de lucha.
“No he podido conseguir convivir o siquiera ver a mi hija a pesar que no tengo restricción alguna, cumplo con el pago puntual de la pensión alimenticia, no lo he logrado; cuando te separas y si no tienes los medios de pagar un abogado te despides de tus hijos, y en los juzgados no hacen lo que deben hacer” explicó.
En ocasiones cuando alguno de los padres no permite a su expareja ver a sus hijos por resentimientos u odio empieza lo que se conoce como alienación parental, el padre o la madre hablando mal del otro y sembrando la semilla del odio en su hijo, concluyó.