Los resabios de la democracia con MorenaBC
Por Jaime Delgado
MEXICALI.- Un mal sabor de boca dejó el triunfo de Morena en Baja California, el desaguisado de la virtual Senadora electa Alejandra León, opaca la derrota -muy bueno para los azules- del PAN, Partido del gobernador «Kiko» Vega de Lamadrid.
Los panistas fueron derrotados de tal forma, que los militantes bromean que ni las placas alcanzaron a ver del camión que los arrolló. «Kiko» Vega prácticamente culpa a la arrolladora ola de Andrés Manuel López Obrador, un fenómeno político que ganó en 30 Estados, más 70 Senadores, más de 300 diputados federales, gubernaturas y la joya de la Corona: la Presidencia de la república.
El Gobernador Vega de Lamadrid no quiere reconocer que el pueblo hizo un llamado en las urnas, y reconocer ese mensaje es derrotarse anticipadamente, y entregarse de nuevo a la «ola Morena» para el 2019.
Vega de Lamadrid es el sexto gobernador de Baja California con militancia del PAN, van 5 sexenios ya azules. El mensaje -previo a la elección estatal de 2019- es que el PAN se ponga las pilas, y recobren confianza con los votantes, o se van a descansar durante una temporada. Quien venga es igual de incierto.
El mandatario estatal recordó procesos electorales anteriores, donde les fue mal en los comicios federales y sacaban buenas cuentas en los estatales, otras veces fue al revés. El asunto es que bajo ese escenario, el llamado en las urnas del pasado domingo primero de julio, no es otro cualquiera, y el PAN se va recuperar para el proceso electoral local que empieza en septiembre.
«Kiko» Vega no acepta ninguna culpa en esa derrota, al menos en público. Luego destaca los logros obtenidos en su gestión, la cual llega a su ocaso, donde se empiezan los cierres, preparar maletas y dejar el escenario mejor posible al PAN. La popularidad del Gobernador del Estado no ha estado en los mejores números, es baja y la sociedad se ha manifestado de manera masiva en el segundo trienio del Gobernador.
Hasta en Change.org se pide su renuncia. En la plaza pública hay inconformidad y en las redes sociales de igual forma, no hay mayor parecido al cierre del presidente Enrique Peña Nieto.
Morena se pone parejo al PAN para competir por las posiciones en juego en 2019: Gobernatura, 25 Diputados y 5 Ayuntamientos. Puede ganar todo, si sigue la ola Obrador, pero si vuelven a darse desaguisados en Morena como el de Alejandra León, o denuncias de corrupción, errores a la hora de gobernador, derrocharían la oportunidad de quitarle el poder a los azules para el próximo año y luego de 30 años.
«Kiko» Vega y los panistas lo saben perfectamente, trazar una ruta de emergencia para tener posibilidades de ganar el 2019, Morena con el Gobierno Federal, y la luna de miel con Andrés Manuel López Obrador. El PAN tiene el Gobierno estatal, una estructura vieja y arcaica, pero aceitada.
Los dos Partidos no tienen figuras rentables para ganar, en ese renglón están parejos. Los que se mencionan quieren gobernar 6 años, no 2 años y 9 meses, como será el próximo periodo del Gobernador de Baja California 2019-2021.
Luego viene la rebelión en el PAN, una fuerza que busca quitarle al Gobernador la capacidad de decidir sobre candidaturas, pero ese es otro tema para el jueves.