MEXICALI.- Este viernes los Casinos instalados en Mexicali reiniciaron las actividades a un 30% de sus capacidades y aplicando medidas precisas de seguridad e higiene.
La actividad comercial de los Casinos es la tercera en reiniciar labores, después de los restaurantes y gimnasios, situación que causó polémica debido a que, en esta Ciudad Capital, está confirmado que el grupo poblacional comprendido por adultos mayores, que es uno de los mas vulnerables para la enfermedad COVID 19; es uno de los principales clientes de este tipo de establecimientos.
El Regidor del XXIII Ayuntamiento de Mexicali, Héctor Ibarra Calvo, manifiesta su rechazo a la determinación de las autoridades para la reapertura de los casinos, cuando hay otros rubros comerciales que también están pasando por situación crítica debido a que ya tienen varios meses en inactividad.
Dijo que la actividad de los Casinos es igual de legítima que la de los cientos de comercios que están instalados al interior de plazas comerciales y que no han reabierto, el conflicto es que la población más vulnerable para Covid-19, es precisamente la que mas frecuenta los sitios de apuestas.
Al interior de un Casino visitado por Periodismo Negro, se pudo constatar las distintas medidas de seguridad para ingresar, distintos tapetes para limpiarse el calzado, gel limpiador, toma de temperatura y un registro con el número de personas al interior.
Ya al interior, la sana distancia entre la clientela se logra con máquinas «tragamonedas» apagadas para evitar aglomeraciones, letreros anunciando que tal o cual máquina esta sanitizada y lista para usar; la zona de restaurante con sólo el 30% de las mesas y solamente se permiten dos comensales por cada una.
Algunas personas entrevistadas manifestaron su beneplácito por esta reapertura ya que es importante contar con algún tipo de entretenimiento después de tanto tiempo encerrados; consideraron que las medidas que están tomando para ingresar al Casino son las adecuadas para evitar contagios.
Otros hablaron sobre la importancia de reactivar la economía, especialmente la de los trabajadores de este tipo de locales que ya tienen meses sin laborar y, en algunos casos complementan sus ingresos con las propinas que les dan los asistentes.