Comunicado de prensa
El sistema digestivo del menor debe habituarse gradualmente a los alimentos.
ENSENADA.- La lactancia materna es indispensable para el desarrollo saludable de los recién nacidos, sin embargo, es recomendable comenzar con la alimentación complementaria a partir de los 6 meses de edad, a fin de que los requerimientos nutricionales requeridos con el crecimiento, sean satisfechos.
Así lo informó la responsable del Programa de Nutrición IRAS (Infecciones Respiratorias Agudas) y EDAS (Enfermedades Diarreicas Agudas), de la Secretaría de Salud, Nancy Angélica Márquez Martínez, quien además detalló que es importante que las madres combinen la lactancia materna hasta los 2 años, junto a otros alimentos.
“La leche materna se debe ofrecer al recién nacido a partir de los primeros minutos de vida, la succión que realiza el menor es la responsable de estimular la producción de calostro. Si consideran que no producen suficiente leche o tienen problemas para amamantar, pueden acercarse al Centro de Salud para recibir asesoría profesional y adecuada”, dijo.
Señaló que el motivo para iniciar de forma gradual la introducción de estos alimentos, es con la finalidad de evitar intoxicaciones o el desarrollo de alergias, ya que el sistema digestivo del menor debe habituarse gradualmente a los alimentos.
A partir de los 6 a 7 meses se sugiere iniciar con el consumo de agua; y de 7 a 8 meses iniciar con alimentos picados finamente o machacados, además de iniciar con el consumo de legumbres; siempre eligiendo alimentos naturales hechos en casa.
“De los 8 a 12 meses ya se pueden introducir alimentos picados en trocitos, como derivados de la leche, huevo y pescado para ser consumidos de 3 a 4 veces al día o como colación, y finalmente a partir de los 12 meses, ya se puede incorporar al menor por completo a la dieta familiar”, explicó.
La responsable del programa invitó a las personas que tengan a un menor de edad a su cargo, acudan al Centro de Salud más cercano para valoración médica, a través del programa ‘Control del niño sano’, así como asesoría nutricional respecto a los alimentos recomendados para la alimentación complementaria que contribuya a la salud y el correcto desarrollo del menor.