Recibe el mandatario estatal el bastón de mando de los pueblos originarios en una ceremonia muy autóctona.
El programa musical enmarcó el estreno mundial de la Obertura San Quintinense, del compositor Enrique González Medina, quien la creó expresamente para la ocasión
SAN QUINTÍN.- Pobladores del Valle de San Quintín se mostraron orgullosos del talento artístico que desde el escenario mostró un grupo de músicos y jóvenes estudiantes, como parte del histórico concierto “Baja California. Tierra que Suena”, actividad que marcó el inicio de la agenda del Gobernador Jaime Bonilla Valdez.
Tras agradecer la entrega del bastón de mando por parte de 16 representantes de grupos culturales indígenas y autoridades tradicionales de la zona sur de Ensenada, el mandatario estatal sostuvo que San Quintín ya no será menos importante que el resto de los municipios.
Destacó el hecho de que la Orquesta de Baja California (OBC), desde su creación, jamás se había presentado en el Valle de San Quintín, y por ello este concierto constituía el inicio de importantes acciones en materia de cultura, educación, salud y suministro de agua.
“No le vamos a fallar a San Quintín, y ahora como Gobernador vendré más a esta región, que muy pronto se convertirá en el sexto municipio más rico y productivo del estado”, enfatizó.
Por su parte, Pedro Ochoa Palacio, titular de la recién creada Secretaría de Cultura, enfatizó que el concierto que ofreció la OBC en San Quintín, significa un logro para la difusión de la música clásica mexicana e internacional.
Desde sus butacas los cerca de mil asistentes al concierto, realizado este sábado en el Salón JM del poblado, apreciaron en el escenario a estudiantes de las escuelas Juan Escutia, Vicente Suárez y Lázaro Cárdenas en plena sintonía con los reconocidos músicos de la OBC, bajo la batuta de Armando Pesqueira, en una histórica primera presentación del ensamble en este punto del Estado.
El programa musical enmarcó el estreno mundial de la Obertura San Quintinense, del compositor Enrique González Medina, quien la creó expresamente para la ocasión; así como la interpretación de “La Llorona”.
Previo al concierto, autoridades e invitados recorrieron el altar de muertos, instalado por personal de Rancho Los Pinos en la entrada del Salón, el cual fue dedicado a la memoria del reconocido pintor y promotor cultural oaxaqueño Francisco Toledo.